No importa el nombre que le pongamos, Ángel de la Guarda, Guía Espiritual u otro… es una versión de nosotros mismos con toda la perfección que involucra nuestro ser, se encuentra en una dimensión superior. Lo que encarnamos nosotros en esta tercera dimensión es un fractal, un pedacito de un gran todo, una “monada”. Todos estamos conectados a la Fuente creadora… Por eso muchas veces escuchamos “Todos somos Uno”.
Venimos a aprender algo necesario para nuestra evolución total, pero solo este pedacito viene a ello, como hemos dicho antes, con muchas limitaciones para que resulte el libre albedrio y el avanzar con todas las partes de un ser humano… (hay una canción tipo himno muy bonita que dice… “para llegar a Dios, HAY que aprender a ser humano”).
En los libros Caballo de Troya, Jesús dice que somos los regalones del Padre Azul porque venimos valientemente con tantas insuficiencias, desmemoriados, con muy poca consciencia y sin embargo la mayoría de nosotros somos buenas personas.
Cómo podemos conectarnos con nuestro Ser superior… siempre hemos podido, pero en la actualidad somos afortunados que los canales están mucho más abiertos y nuestro estado de consciencia ha avanzado… lo podemos hacer en las oraciones, meditaciones, cada vez que tengamos la intención. Y cómo nos contactarán para guiarnos, primero tenemos que pedirlo para respetar el libre albedrío y luego sensibilizarnos, alinearnos con nosotros mismos porque lo harán a través de sueños, intuiciones, percepciones, sincronías, secuencias, frecuencias, etc… si estamos preparados podemos tener visiones o audiciones de los mensajes y directrices.
Para estar alineados debemos intencionar ese objetivo, el chakra Tercer Ojo, cuando está equilibrado nos alinea y nos hace tener esta comunicación activa… para potenciar este equilibrio es bueno hacer pausas, ojalá permanecer unos momentos en posición horizontal (baños de tina, siesta, tomar sol, etc) y usar el color azul (lapislázulis) y comunicarse con este Ser, preguntarle y lograr entender sus respuestas.
Siempre recomiendo una alineación de chakras y estar alertas a las señales que nos puedan enviar, colibrís, plumas, mariposas, y otras, tienen un mensaje, un significado.
Siempre recuerda que tus palabras, pensamientos e intenciones crean realidades, por ende proponte establecer una comunicación constante, una guía y asistencia y un amor fluido e incondicional.